domingo, 1 de diciembre de 2013

La función de un promotor social (01/12/2013)



Magaly Vera

Jamás en mi vida había trabajado en una Municipalidad, así que sentí curiosidad por saber cuál era el rol de un promotor social. No sabía bien en qué consistirían mis funciones por más que en el TDR indicase:
·         “Promover la participación activa de los vecinos y organizaciones sociales y vecinales en los espacios de participación, diálogo y concertación promovidos por la MML y otros.
·         Facilitar reuniones de trabajo, proveer y difundir información en la comunidad, recopilar datos, recoger opiniones, reclamos y propuestas, y monitorear la atención a las demandas y necesidades de los vecinos y organizaciones vecinales.
·         Brindar asesoría y orientación a los vecinos y organizaciones vecinales sobre aspectos organizativos y de formalización, y sobre los mecanismos y procedimientos para la atención de sus demandas e iniciativas.
·         Apoyar las actividades de promoción de la participación ciudadana en zona y distritos de Lima Metropolitana asignados por la Gerencia de participación vecinal.
·         Preparar informes periódicos o especiales al Jefe del equipo de promoción interdistrital sobres sus actividades.
·         Proponer iniciativas que contribuyan al cumplimiento de las metas y funciones de la Áreas interdistritales.
·         Otras funciones y encargos que la Gerencia de Participación vecinal le asigne.” (ver CAS de la página web de la Municipalidad)

Y en verdad esas no fueron mis funciones, sino el de operador político. Ósea la portátil del partido de turno. Y ni eso pude hacer bien debido a las terribles descordinaciones que habian entre gerencia y gerencia. Espero que eso lo hayan superado a la fecha. Ilusamente había pensado que la labor era más social, promoviendo la participación de organizaciones sociales, craso error.

Mi función y la de mis compañeros de turno fueron:
1. Volantear las nuevas rutas de los buses en los diferentes paraderos de la Avenidas principales, labor que realizábamos desde las 6:00 a.m. La excusa para justificar esta labor sería la de brindar orientación, pero se repetia lo mismo en la gerencia de transporte.
2. Mitigar los paros de transportistas, evaluando donde serían las posibles concentraciones de los revoltosos, pese a que esa, era labor de la policía.
3. Sensibilizar a la población sobre la importancia de la construcción de la avenida Canadá y a los microempresarios. Justificada por la de brindar orientación.
4. Sensibilizar a la población de los alrededores de la Parada, de la importancia de un parque ahí. Justificada también por brindar orientación.
5. Difundir el proyecto “adopta un árbol” que se repetía con el de SERPAR.
6. Elaborar informes de las zonas donde se ejecutaría una obra de la Municipalidad con los dirigentes de la zona, lo que supuestamente le toca a EMAPE, que también tiene promotores para la misma labor.
7. Recepcionar solicitudes de requerimientos de obras, lo que se duplicaba ya que esa era labor del Departamento de Desarrollo urbano que lo derivaba a las oficinas de EMAPE, INVERMET  etc. ya que la gerencia de participación vecinal no tenía esa facultad ni la tendrá.
8. Visitar las zonas de conflicto como Costa Verde, playa la Herradura etc. a fin de evaluar el conflicto y hacer el informe respectivo ya que no era su competencia, solucionar dicho conflicto. Sino solo informar. Entre una serie enorme de funciones que imagino están incluidas en “y otras que designe la GPV” y que espero no hayan duplicado el presupuesto de planilla. Mi jefe inmediato superior, siendo sociólogo, lo justificaba todo, debido a que tenia por lema: "la misión de una municipalidad, no es ser eficiente".

En resumen, quería ser una gerencia pulpo, pero no supieron por dónde empezar a realizar sus funciones. Así que todos tenían una labor específica, que al final se cancelaba por las labores de bombero de apagar incendios donde hubiese. Ósea no haciamos la labor para la cual habíamos sido contratados, sino que se reducía a ser portátil antillamas, nada más. Olvidando la verdadera labor social que era orientar y brindar orientación a la población, que hasta ahora sigue perdida, pensando que la Municipalidad no hace obras, sino que las paraliza como es el caso del Túnel Santa Rosa.

Y como simple trabajadora, solamente nos teníamos que limitar a cumplir órdenes de arriba. Era un sacrilegio cuestionarlos. Y si la cabeza estaba en las nubes, el resto también vagaba por el espacio sideral. Una pena tener que aprender la humilde labor de un promotor en la vida misma. Pero conocí personas valiosas cuya sensatez y trabajo, me hizo admirarlos como a Basilio Contreras.

Solo dures tres meses apagando incendios. Porque no podías ni sugerir alternativas, solo eras un peón en un gran engranaje de órdenes ya dadas. Una gran pena, aprender a recibir órdenes tontas, cuyos resultados: saltan a la vista en la apreciación que se tiene de la Municipalidad de Lima y de la gestión de Susana, ya que nadie dice que cogobierna con los de la confluencia. Todo recae en Susana Villarán.

Con trabajos  así, los revocadores tuvieron apoyo.

Esta narración es mi propia vivencia, la que viví de noviembre a diciembre del 2011.

1 comentario:

  1. ¿Y dónde esta la gestión de izquierda? Ni de pensamiento ni de acción; solo un poco de propaganda de cjiche.

    ResponderEliminar